La falta de deseo sexual es un bajo interés en las relaciones sexuales y recibe distintos nombres: inapetencia sexual, falta de deseo erótico, inhibición del deseo sexual, En definitiva, significa que la persona siente poco apetito por el sexo. Y las causas pueden ser muy diversas:
- El estilo de vida.
- El estrés, el cansancio.
- Baja autoestima
- La sobrecarga de obligaciones laborales y/o personales, pueden afectar al deseo.
- Preocupaciones familiares y personales (autoestima, problemas laborales, situaciones que no puede controlar, políticas, sociales).
- Efectos secundarios de tratamientos por enfermedad.
- Problemas de parejas (discusiones, molestias, falta de tolerancia, falta de compresión).
Síntomas de la falta de deseo sexual
Existen síntomas que sirven como alerta para tomar medidas:
Excusas para no tener sexo: Puede ser la más evidente; ahora no puedo, no es buen momento, no me siento bien, mejor el fin de semana, en la mujer hasta llega a inventar que está en sus días, cuando no es así.
Pierdes el interés por la pareja: Ya no te gusta tu pareja como antes, quizás solo exista un cariño pero se pierde el gusto y por ende se pierde el interés y hasta la ausencia de fantasías sexuales.
Las rutinas: Siempre es lo mismo, no se realiza el preámbulo sexual, solo ir directo a la penetración. Percibes que se pierde la magia, no hay cambios y lo haces para cumplir con el compromiso, pero a la larga casusa aburrimiento.
Falta de estímulo: No buscas despertar interés sexual en tu pareja, lo que podría causar dolor, por no lubricar lo necesario. También se debe consultar al médico para descartar que sea un problema médico.
La Organización Mundial de la Salud señala que la salud sexual es un estado de bienestar físico, mental y social en relación con la sexualidad. Por lo que este problema se debe solucionar con la ayuda de un especialista que identifique el origen y las causas para alcanzar una relación sana.